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CMI saluda a la comunidad musulmana mundial al comenzar


From "Sheila Mesa" <smm@wcc-coe.org>
Date Fri, 16 Nov 2001 10:32:26 +0100

el Ramadan

Consejo Mundial de Iglesias
Comunicado de prensa, PR-01-42
Para difusion inmediata
16 de noviembre de 2001

El Consejo Mundial de Iglesias saluda a la comunidad musulmana
mundial al comenzar el Ramadan

El secretario general del Consejo Mundial de Iglesias (CMI), Dr.
Konrad Raiser, ha enviado una carta a los jefes de las
comunidades religiosas musulmanas de todo el mundo, para destacar
el hecho de que el comienzo del periodo santo musulman del
Ramadan coincide este ano con el Tiempo de Adviento cristiano.
 

En su carta, Raiser se refiere a los vinculos espirituales que
unen a cristianos y musulmanes y que es necesario redescubrir
tras los acontecimientos tragicos del 11 de septiembre.  

"Como cristianos, nos oponemos a la tendencia, no poco comun en
muchos paises occidentales, a considerar a los musulmanes como
una amenaza y a describir el islam con estereotipos al mismo
tiempo que se proyecta una imagen de si mismo positiva", escribe
Raiser.  

Hace un llamamiento a una verdadera cooperacion, a aunar
esfuerzos para prestar asistencia a las victimas , defender los
derechos humanos y el derecho humanitario y para "que se
intensifique el dialogo entre religiones y culturas".  

Raiser ha enviado a las iglesias miembros del CMI y a otras
organizaciones ecumenicas y confesionales una copia de la carta
enviada a las jerarquias musulmanas. En la carta de
acompanamiento, Raiser les pide que estudien "cuales son las
formas mas apropiadas en la respectiva situacion para compartir
con miembros de la comunidad musulmana, durante las proximas
semanas, momentos de comunion espiritual y de oracion por la paz
y la justicia".  

Y explica que "ese mensaje pretende ser una expresion de nuestra
solidaridad con la comunidad musulmana en estos tiempos de prueba
y de nuestro compromiso con el espiritu de dialogo y de confianza
mutua que hemos cultivado a lo largo de estos ultimos decenios". 

El texto completo de la carta a los dirigentes musulmanes puede
leerse a continuacion:  

'Este ano coinciden el santo mes del Ramadan y el tiempo santo
de Adviento en el que los cristianos se preparan con ayuno y
recogimiento a celebrar la Natividad de Jesucristo. Es un signo
mas entre muchos otros que nos hace "mas amigos" y nos une en
la obediencia comun a Dios.  En estos tiempos de prueba es
necesario redescubrir los vinculos espirituales que nos unen. 

El ayuno nos recuerda la presencia de Dios. Invita a los
creyentes, en su vida personal y en comunidad, a volverse a Dios
con humildad y amor, para pedir perdon y la fuerza necesaria.  El
ayuno es un tiempo de misericordia.  Recibimos una vez mas la
gracia de Dios y pedimos esa gracia para otros.  Es tiempo de
piedad, de profunda devocion y de generosa dadiva.  La capacidad
de mantenerse firmes que caracteriza a los creyentes y reafirma
que los seres humanos no solo tienen necesidad de pan, que sus
cuerpos son sus siervos y no sus amos, nos recuerda que tener es
compartir.  Es un llamamiento a hacer justicia; porque tratar a
los otros con justicia es prueba de verdadera piedad.  

Los actos abominables del 11 de septiembre fueron condenados con
autoridad por personalidades de la comunidad islamica y de las
iglesias.  El principio Quranico de que nadie cargara con la
carga ajena tuvo amplia resonancia entre los musulmanes. Hemos
oido a muchos amigos musulmanes recordar a si mismos y a todos
nosotros el mandamiento quranico de que no debemos permitir que
el odio de las gentes nos incite a obrar injustamente.  Los
musulmanes y los cristianos defienden con conviccion la justicia,
y han puesto en guardia contra la tentacion de una venganza ciega
y de represalias indiscriminadas.  Las iglesias, en los Estados
Unidos y en otras partes, han escuchado con humildad la
exhortacion del apostol a que no paguemos a nadie mal por mal.
 Muchos cristianos han expresado su conviccion de que la
respuesta al terrorismo no debe reforzar el ciclo de la
violencia.  Todo acto que destruye la vida, sea mediante el
terrorismo o la guerra, es contrario a la voluntad de Dios.  

Los tragicos acontecimientos de que hemos sido testigos
recientemente han demostrado la vulnerabilidad de todas las
naciones y la fragilidad del orden internacional.  Un mundo en el
que mas y mas personas e incluso naciones enteras son confinadas
a la extrema pobreza, mientras otros acumulan grandes riquezas,
es intrinsecamente inestable. La tendencia a imponer la propia
voluntad -por medio de la fuerza, si es necesario - que se
manifiesta en las politicas de las naciones poderosas suscita el
resentimiento de los mas debiles.  El lenguaje de la amenaza y la
logica de la guerra atizan la violencia.  Mientras se ignoren o
se menosprecien los clamores de quienes son humillados por
injusticias sin tregua, por la privacion sistematica de sus
derechos como personas y como pueblos y por la arrogancia del
poder basado en la fuerza militar, el terrorismo no podra ser
vencido.  La respuesta hay que buscarla en la reparacion de las
injusticias que engendran la violencia en las naciones y entre
las naciones.  

La violencia del terrorismo - cualquiera que sea su forma - es
aborrecible, sobre todo para quienes creen que la vida humana es
un don de Dios y, por lo tanto, infinitamente valiosa.  Cualquier
intento de intimidar a otros y de infligirles indiscriminadamente
la muerte y el sufrimiento, sean quienes fueren los autores, debe
ser condenado universalmente.  Sin embargo, ante esos actos
inhumanos, la reaccion no debe ser estigmatizar a los musulmanes,
a los arabes o a cualesquiera otros grupos etnicos.  Las iglesias
estan llamadas a hacer que las voces de fraternidad y compasion
ahoguen las de hostilidad, de racismo y de intolerancia. La voz
de la fe, que se ha expresado en muchas iniciativas de amistad y
de solidaridad, debe vencer la del fanatismo, el miedo y el
nihilismo.  

Como cristianos, nos oponemos a la tendencia, no poco comun en
muchos paises occidentales, a considerar a los musulmanes como
una amenaza, y a describir el islam con estereotipos al mismo
tiempo que se proyecta una imagen de si mismo positiva.  Los
cristianos deben guiarse en su vida por el mandamiento divino de
no decir falso testimonio contra sus projimos. El encuentro de
los cristianos con el islam y con los musulmanes exige honestidad
e integridad intelectual. Los cristianos tienen que estar
presentes junto a sus projimos musulmanes en espiritu de amor,
respetando sus compromisos religiosos mas profundos, y
reconociendo lo que Dios ha hecho y continua haciendo entre
ellos.  Y asi encuentra su verdadero significado el dialogo entre
musulmanes y cristianos en el que el Consejo Mundial de Iglesias
sigue empenado.  Muchas son las voces que se elevan hoy para que
se intensifique el dialogo entre religiones y culturas.  Ahora
bien, ese dialogo solo puede dar frutos si esta basado en la
confianza, en un respeto inequivoco de la identidad y la
integridad de los otros, una disposicion a comprender al otro en
sus propios terminos y a poner en tela de juicio el entendimiento
de si mismo, la historia y la realidad actual.  

Del dialogo de vida entre cristianos y musulmanes en diversas
partes del mundo y de sus compromisos comunes, hemos aprendido
que nuestras comunidades religiosas no son dos bloques
monoliticos que se enfrentan o compiten uno con otro. Hemos
aprendido que las tensiones y los conflictos, cuando sobrevienen,
no definen ni deben definir fronteras de sangre entre musulmanes
y cristianos.  Reconocemos que la religion expresa los
sentimientos y las sensibilidades mas profundas de las personas y
las comunidades, sus memorias historicas y suele recurrir a
lealtades universales.  Sin embargo, esto no justifica las
reacciones irracionales que hacen que las personas se enfrenten
unas con otras en lugar de aunar esfuerzos, por encima de sus
lealtades religiosas, para aplicar los principios comunes de
justicia y reconciliacion.  Es necesario liberar al islam y al
cristianismo del peso de los intereses de grupo y de las
interpretaciones interesadas de creencias y convicciones.  Sus
creencias deberian ser la base de un compromiso critico frente a
la debilidad humana y a las deficiencias del orden social,
economico y politico.  

Es tiempo de dar signos de verdadera cooperacion, de mancomunar
nuestras fuerzas para prestar asistencia a las victimas y de
defender los derechos humanos y el derecho humanitario.  Este
ambito de colaboracion es decisivo en momentos en que el
trabajo humanitario se resiente debido a restricciones y a la
desconfianza, y se lo utiliza para fines politicos y de
propaganda llegandose hasta a vincularlo con operaciones de
guerra.  Ha llegado el momento de ahondar en nuestro encuentro,
de compartir nuestras penas, nuestras expectativas y nuestras
esperanzas.  

Queridos amigos:
La oracion por la paz de Dios esta en el centro de la
espiritualidad de musulmanes y cristianos. Al comenzar el mes del
Ramadan, los saludamos con una palabra de paz y de amistad.  

Que vuestro ayuno, y el nuestro, sean agradables a Dios!'  

Para mas informacion ponganse en contacto con:
Bob Scott, Equipo de Informacion, Tel.:  (+41.22) 791.61.66

**********
El Consejo Mundial de Iglesias (CMI) es una comunidad de 342
iglesias, procedentes de mas de 100 paises de todos los
continentes y de la mayor parte de las tradiciones cristianas. La
Iglesia Catolica Romana no es una iglesia miembro pero mantiene
relaciones de cooperacion con el CMI. El organo rector supremo es
la Asamblea, que se reune aproximadamente cada siete anos. El CMI
se constituyo oficialmente en 1948 en Amsterdam (Paises Bajos).
Al frente del personal del CMI esta su Secretario General, Konrad
Raiser, de la Iglesia Evangelica de Alemania.

Consejo Mundial de Iglesias 
Oficina de Relaciones con los Medios de Informacion
Tel: (41 22) 791 6153 / 791 6421
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Correo electronico: ka@wcc-coe.org 
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1211 Ginebra 2, Suiza


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